Sanidad Andaluza

Sanidad Andaluza. María de Prado López

Se va a realizar una matriz DAFO de la Sanidad Andaluza, aún sabiendo que siempre por la complejidad de la misma no abarca toda su faceta estructural. Nos basaremos en los siguientes objetivos de la sanidad pública:

  1. Garantizar la accesibilidad para todos los procedimientos.
  2. Promover y conseguir un sistema de salud de calidad y equitativo al resto de comunidades de España
  3. Asegurar un adecuado tratamiento y en tiempo de los pacientes, incidiendo en aquellos apremiantes como son los procesos oncológicos malignos.
  4. Ofrecer tratamientos modernos basados en la evidencia, con la mejor tecnología disponible.

Es decir, que todos los pacientes se traten en tiempo y de la mejor manera posible, con profesionales capacitados y con la tecnología más adecuada y moderna de acuerdo a la evidencia.

En Andalucía, los plazos de garantía están regulados en 90 días para procedimientos de cirugía cardiovascular, 120 días para patología articular, 180 días para patología espinal y otras y 365 días para el resto de los procedimientos no garantizados. Se enlaza al documento explicativo: https://www.sspa.juntadeandalucia.es/servicioandaluzdesalud/ciudadania/derechos-y-garantias/tiempos-de-respuesta-asistencial-listas-de-espera/plazos-y-garantias.

Para dar respuesta a estos plazos de garantía existen tres posibilidades:

  1. Intervenir a los pacientes dentro de la actividad ordinaria (mañanas y continuidad asistencial o turnos de tarde). En la actualidad es imposible dar respuesta a la demanda en este horario por varios motivos: estructurales, de personal y por falta de incentivos para la cirugía y consultas especializadas de tarde en esta modalidad (el salario base es muy bajo para que sea fácil retener a un profesional trabajando solamente en turnos de tarde).
  2. Actividad extraordinaria en autoconcierto. Modalidad muy eficiente y ventajosa desde el punto de vista económico para todo el equipo quirúrgico, pero no es factible para todas las especialidades debido a una tabla de tarifas anticuadas y que necesita ser revisada (por ejemplo, por una vasectomía, el cirujano cobra 50 euros y apenas 25 si opera con ayudante). Esto ocasiona que se favorezca el autoconcierto de prótesis frente a otros procedimientos de cirugía menor o espinales.
  3. Derivación a concierto. Mientras que el autoconcierto permite un control del proceso quirúrgico del paciente, la derivación a concierto es útil pero tiene algunas desventajas como son: los pacientes son tratados por un equipo diferente de profesionales y muchas veces tenemos que atender los malos resultados y resolverlos con técnicas más complejas, además, muchos procedimientos son rechazados por los equipos de las clínicas contratadas por su elevada complejidad o bajo rendimiento económico. No obstante, hay cirugías en las que es muy útil para atender toda la demanda.

En la actualidad, los pacientes son ofrecidos por la posibilidad de concierto, si acceden, tienen los tiempos de garantía de 90, 120, 180 o 365 días que corresponden a cada procedimiento según decreto. Sin embargo, si rechazan el concierto por preferir ser tratados por su médico o en el hospital, pasan automáticamente a perder la garantía y tener un plazo de garantía de 365 días. Esto afecta a la posibilidad de que sean intervenidos en tiempo por sus médicos en forma de actividad extraordinaria.

Con esto en la mente, paso a describir los factores externos e internos que creo se han de tener en cuenta a la hora de elaborar cualquier plan de gestión.

Factores externos

Amenazas

  • Envejecimiento inexorable de la población española, que incrementará las listas de espera con patología crónica.
  • La situación mundial que nos amenaza con una profunda crisis económica, lo cual limitaría la posibilidad de crecimiento y mejora de nuestro sistema sanitario.
  • La incertidumbre de la evolución de la pandemia COVID 19
  • El crecimiento de grupos de Hospitales Privados que amenazan con quedarse o desviar los esfuerzos de profesionales capacitados y formados en nuestro sistema.
  • Peores sueldos de los sanitarios con respecto a los Servicios Sanitarios de otras comunidades autónomas con el consecuente éxodo hacia las mismas.
  • Población más informada y conectada, que demanda una sanidad de calidad, en tiempo y la posibilidad de libre elección de centro y especialista.
  • Cada vez hay una mayor dependencia tecnológica en los tratamientos quirúrgicos, que encarecen enormemente su implantación y necesitan de una adecuada formación (p.e. cirugía robótica, resonancia intraoperatoria, navegación intraoperatoria, cirugía laparoscópica / endoscópica).
  • Falta de inversión en investigación a nivel nacional.
  • Segmentación del sistema sanitario con distribución asimétrica de recursos.
  • Limitación de recursos para garantizar una adecuada cobertura universal, lo que dificulta el crecimiento del sistema (estructura, personal, etc.)
  • Exceso de celo en las campaña de ideología de género que lejos de ayudar, confunden aún más a los jóvenes y enturbian las relaciones naturales del hombre y la mujer.
  • Crecimiento de la inmigración no controlada que está condicionando un aumento de las patologías “ no habituales” y un resurgir de otras ya controladas.
  • Aumento de ancianos en riesgo de exclusión social sin dotación pública para atenderlos, está casi todo en manos de ONG
  • Ausencia de campañas de USO RESPONSABLE de los servicios públicos, del Sistema Andaluz de Salud, la manida frase de “yo te pago a ti tu sueldo” no genera más que malestar entre los profesionales y los usuarios, que exigen cada vez más inmediatez en su atención ,incluso por patologías banales que protocolariamente pueden demorarse sin riesgo alguno para el usuario.
  • Investigación subvencionada por empresas privadas que ocasionan un “ sesgo “ en los resultados.

Oportunidades

  • Posibilidades de colaboración con la industria dentro del marco legal para recuperación de consumos en bienes estructurales (por ejemplo, mejoras estructurales en concursos de material radiológico, de diagnóstico y quirúrgico).
  • Nuevas vías de colaboración económica público-privada.
  • Posibilidad de acceso a fondos de recuperación europeos (por ejemplo, fondos COVID).
  • Marco político favorable con el denominador común de fortalecer la sanidad pública
  • La presión de la población por acceder a los mejores tratamientos, con una mayor eficiencia y garantía es a su vez una oportunidad, puesto que favorece el progreso y fuerza a los profesionales a estar capacitados y bien formados.
  • Promoción de la formación continua de los profesionales, desde el gobierno de la junta, de manera REMUNERADA, que en la actualidad se centra en su gran mayoría en cursos de : enfermedades tropicales, atención a los MENAS, Eutanasia, política de género, y mindfulness, estando aquellos cursos sobre soporte vital e innovaciones terapéuticas en manos de plataformas de la industria farmacológica, los cursos de plataformas de la junta como IAVANTE ofrecen siempre un número muy limitado de plazas, y suelen ser en horario de tarde, lo que dificulta la asistencia de algunos profesionales que no pueden conciliar su vida familiar.
  • La incorporación de nuevos sistemas de información y registro electrónico hacen factible el manejo del sistema desde un punto de vista global, realizar comparaciones objetivas entre diferentes centros e incorporar nuevas medidas necesarias de resultados en salud que ayuden a una mejor distribución y más eficiente de los recursos.
  • El incremento de la demanda es a su vez una oportunidad puesto que, a mi modo de vez, son estas situaciones las que favorecen las mejoras organizativas y fuerzan la reordenación de los recursos para inyectar más dinero a la sanidad.
  • A su vez, el desarrollo de la sanidad privada puede ser también una oportunidad de reinventar el sistema buscando una situación win-win para los profesionales y pacientes.
  • Escasez de una vía de formación vía MIR en hospitales privados, lo que favorecerá en el futuro su recaptación o reordenación para mejorar la equidad.
  • Se puede incrementar el número de plazas en las facultades de medicina y enfermería para cubrir los puestos deficitarios.
  • Andalucía cuenta con establecimientos hospitalarios que están abandonados o infrautilizados ( Ejemplo: Hospital de los Morales en Córdoba ) que podrían ser puestos a un 100% de su capacidad en camas y quirófanos, dando servicio a los ciudadanos, permitiendo acortar las listas de espera.
  • Reapertura de consultorios rurales, si se incrementan el número de profesionales y de incentivos para los mismos.

Factores internos

Debilidades

  • Inequidad en la distribución de los recursos a nivel nacional y comunitario (hay centros que tienen mucho y otros muy poco).
  • La formación especializada en forma de cursos de super-especialización y congresos es pagada enteramente por la industria.
  • Ralentización en la incorporación de sistemas de codificación más avanzados (que además, no hemos diseñado nosotros), como el CIE-10 en el registro de demanda quirúrgica. Hoy en día, los códigos son muy genéricos en un número significativo de especialidades y admiten una gran variabilidad en cuanto a tiempos, ocupación de quirófano, estancia media, así mismo patologías de gran prevalencia no están claramente recogidas, debiendo ser codificadas como otros, y sí existen códigos como “homosexualidad” y “accidente de nave espacial con ocupante único”.
  • No existe una comparación real de resultados inter-centro, sobre todo, en cuanto a resultados en salud, indicaciones, etc. y, además los datos disponibles son difíciles de interpretar o agregar (por ejemplo, libro de tasas de indicación quirúrgica anual).
  • El salario base de los profesionales es bajo y, en ausencia de actividad en régimen de continuidad asistencial, extraordinaria o guardias, este salario favorece la migración de profesionales muy cualificados a la sanidad privada.
  • Este mismo hecho hace poco factible la distribución del trabajo “por turnos” de tarde, sin ningún tipo de remuneración adicional.
  • Existe una gran limitación estructural en muchos hospitales públicos, particularmente en Córdoba, donde el área quirúrgica es pequeña y es imposible crecer en sesiones de actividad ordinaria de mañana.
  • La mejora de los quirófanos (quirófanos “inteligentes” con sistemas de video centralizados, sin cables, interconectados, con incorporación de la última tecnología) se hace de forma asimétrica y sin un plan director centralizado (cada uno va pidiendo como puede o se aprovechan los concursos para que la industria los renueve). Es necesaria una renovación y modernización estructural y tecnológica de todos los quirófanos de nuestro sistema de salud, particularmente en Andalucía. (En Córdoba hace falta un hospital quirúrgico nuevo).
  • La dispersión geográfica de algunos centros no favorece la creación de equipos multidisciplinares para el tratamiento de las patologías y dificulta las campañas de promoción de la salud.
  • La actividad ordinaria de tarde es ineficiente y es necesario fomentar y facilitar sistemas de autoconcierto que favorezcan la recaptación de los profesionales y no vayan al ámbito privado. Las tarifas actuales de autoconcierto son claramente revisables. Además, se trata de una medida temporal, y, cuando se termine, no será posible manejar las listas de espera en actividad ordinaria.
  • En algunas especialidades es necesaria la renovación y ampliación del material quirúrgico, pero no es posible hacerlo rápidamente por las limitaciones presupuestarias (el material va imputado a cada servicio).
  • Ausencia de regularización de la formación de los especialistas quirúrgicos (no hay exámenes tipo Board de otros países ni un examen de conocimientos), y no se favorece la formación transversal en diferentes centros. Tampoco existen programas de fellow-ship que faciliten la super-especialización.
  • Por este motivo, el sistema de bolsa que hay en Andalucía y en otras comunidades no asegura que los profesionales más cualificados y mejor formados acaben en un centro determinado. Sería necesario priorizar la contratación de profesionales con acreditación por parte de la ACSA.
  • Sistema de carrera profesional lento y de difícil acceso.

Fortalezas

  • Desarrollo de plataformas de formación digital vía Moodle o presencial para mejorar la capacitación de los profesionales (por ejemplo, cursos de metodología en investigación). No obstante, no cubren en absoluto las necesidades de formación super-especializada, aunque está en vías de conseguirlo.
  • Desarrollo de los sistemas de información y registros digitales que permiten la comparación intra e intercentros en datos médicos, de hospitalización, quirúrgicos y de accesibilidad, así como tasas de indicación, etc.
  • Creación de equipos multidisciplinares fuertes para homogeneizar las indicaciones terapéuticas de los pacientes (por ejemplo, comités de tumores).
  • A pesar de todo, ha existido una fuerte inversión en tecnología por parte de los centros, como la cirugía robótica, microscopios operatorios, dispositivos de visualización endoscópicos, etc.
  • Nuestros profesionales se encuentran altamente capacitados y son una gran fortaleza para afrontar los retos que nos esperan.
  • Voluntad de los equipos directivos de los centros, a través de los contratos-programa, de dar respuesta a la demanda en accesibilidad quirúrgica.
  • Revisión periódica de la capacitación de los mandos intermedios en aquellos escasos servicios en los que se cumple.
  • Posibilidad de autoconcierto para dar respuesta a la demanda quirúrgica.
  • Progresiva incorporación de la investigación clínica en las especialidades quirúrgicas que incorpora personal con valor añadido en los hospitales (coordinadores de proyectos que ayudan a medir resultados en salud, etc.)
  • Las plantillas se han rejuvenecido bastante, y generan impulso para sacar adelante el trabajo y comenzar nuevos proyectos.
  • Contratos-programa y acuerdos de gestión basados en la gestión clínica, que, si bien hay que revisar en sus indicadores, en sí misma es un avance puesto que potencialmente nos hace comparables.
  • Programas sobre interrupción voluntaria del embarazo, aborto   ( IVE) y eutanasia, bien desarrollados.
  • Todos los andaluces tienen derecho a una política de promoción de la salud, que se concentra en el uso de campañas sanitarias en los centros educativos.
  • Programas de prevención del cáncer de mama y cáncer de cérvix.

Con todo ello se debe de reestructurar y auditar el gasto en salud, de manera que se recupere la DEMORA 0 en atención primaria, se consigan acortar listas de espera de atención especializada, se descongestionen las unidades de URGENCIAS, y no tengamos éxodo de profesionales, habría que estudiar todas aquellas partidas destinadas, a subvencionar chiringuitos feminazis, a fin de eliminarlas y/o recortarlas al máximo.

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