Ese individuo, titular de entidad no sólo como persona jurídica sino también como humana, aúna su condición de hombre casado a lo gay, con la de juez por la gracia del Dios opositado, con la de político vocacional dilecto de PP, C’s y Psoe, y ahora también con la de Ministro del maltrecho interior de las Españas: vamos, toda una unidad de destino por lo particular supeditada, eso sí, a los proyectos disolventes de la Patria de su cuate Sanchez. Sería interesante realizar un estudio etológico de esta clase de especímenes (garzones, carmenas, condespumpidos, bacigalupos, etc. etc.).

Para empezar, en un alarde de imaginación, recupera, para ordenar las Fuerzas de Seguridad del Estado, el Organigrama del muy turbio Rubalcaba: un conocido entre sus amigos como el Merlín de las Cloacas o el Rasputín de Atapuerca. Casi no hace falta decir más. Sus intenciones son las peores para España. Las consecuencias no van a tardar en notarse.

Ayer mismo, este mismo Ministro odiador de las “concertinas” y otras vallas varias, ha asistido impávido a un asalto bélico a Ceuta por parte de unos 400 o 600 o más, invasores violentos y asesinos. Las armas que han utilizado son las “bolas de mierda” (las que más cuadran a su condición) y la “cal viva” (sustancia ésta de la que tiene mucha experiencia el Partido al que ahora sirve). El resultado han sido al menos 25 Guardias Civiles hospitalizados y heridos, algunos de gravedad. Además de la derrota bochornosa que hemos sufrido en nuestra frontera. Todos los Agentes tenían orden de no defenderse y de no usar sus armas (esta es una consigna impuesta a toda la Policía Nacional y a la Guardia Civil). Es decir, se les ordena ser corderos porta-pétalos para no estorbar nuestra rendición incondicional. ¡Y ellos aguantan porque son lo único serio, leal e inquebrantable que nos queda! ¿Pero hasta cuándo? Porque lo normal es que vaya usted, en persona, a defender nuestro interior. Sólo con los cuernos, claro.

Supongo que a Usted no le inquietan (¡espera un poco marmolillo!) las denuncias y querellas que le va interponer Ortega Smith (Secretario General de VOX) con cuanto fundamento jurídico y pruebas fehacientes pueda encontrar en el escenario de los vergonzosos hechos donde ya ha acudido el ilustre jurista. Pero yo, como ciudadano meramente amparado en el sentido común y en la vergüenza ajena que tanto despropósito me produce, sí lo ACUSO, a Usted (o excelencia, o ilustrísimo, o señoría, o simplemente fernandito) y a su padrino eventual Sanchez.

Los ACUSO de insensatez, de torpeza, de irrealidad temeraria, de omisión criminal, de estupidez auto-complacida, de hipócrita moderación buenista, de “progresismo” orientado a las cavernas más arcaicas, de regresión genética, de traición al deber de defender la Patria, de abandono de sus subordinados, de desprecio a todos los ciudadanos españoles, de sacrificio doloso e inútil de los miembros de las Fuerzas de Seguridad, de miopía política, de complicidad con las mafias de invasores, de soberbia culposa, de estupidez supina. ¡Sois todo un ramillete de cipreses y crisantemos cantando al suicidio, a la muerte, a la esclavitud de negros y de moros (manteros, prostitución o invernaderos) y al exterminio fomentado y consentido de los españoles! El Obispo Don Opas y el Conde Don Julián sin que les hayan violado a nadie, sólo por afición.

Y como, ante este Tribunal de mi conciencia, yo soy el único Juez, dicto SENTENCIA. Son CULPABLES. Que la pena impuesta sea la que el Pueblo Español les demande.