Como no sigo la prensa generalista porque ya sé que va a relatar cada medio, supe de la existencia de la campaña electoral andaluza cuando recibí en mi casa de El Puerto de Santa María dos sobres con su correspondiente boleto para introducir dentro de una urna en las próximas elecciones andaluzas. Uno de los sobres, perteneciente a Vox, carecía de cualquier tipo de información exterior acerca del partido mientras que el otro, del PSOE, reflejaba la cara de su candidato, eslóganes, el logo corporativo y la bandera andaluza, demostrando que en los asuntos de vital importancia para ellos, la transición ecológica no es necesaria. Ambos sobres acabaron directamente en el bidón de la basura no reciclable, el mismo destino que tuvieron los que recibí posteriormente, incluido el del PP. Tampoco el uso que darán los partidos a los boletos depositados en las urnas de los colegios electorales será distinto al que yo realicé.
La alerta antifascista de Pablo Iglesias el de la tele
Esto me hizo recordar lo rápido que pasa el tiempo, parece que fue ayer cuando desde la sede de su partido en Madrid la noche del domingo 2 de diciembre de 2018 Pablo Iglesias, el de tele y Podemos, hizo un llamamiento antifascistas ante la irrupción de Vox en el cambalache del parlamento andaluz y la imposibilidad de crear una coalición entre fuerzas progresistas y progresistos, acompañado de otros miembros y miembras de su partido, como por ejemplo mi antigua vecina y ex-secretaria de igualdad Noelia Vera Ruiz-Herrera, a la que nunca conocí mientras viví en el bloque de viviendas situado justamente enfrente de su mansión familiar dentro de una finca urbana, una finca que se convirtió en bloques de vivienda a comienzos de siglo. Curiosamente, ambos ya han abandonado sus cargos, quizás agotados por la fructuosa lucha contra un fascismo andalú que nunca se llegó a implantar gracias a ellos, con un patrimonio muy superior al del momento de su llegada, como el caso del Rey emérito que vino de Roma y del que tanto reniegan pero que tan bien les representan en su forma de actuar, aunque en el caso de la portuense no necesitaba ningún cargo político con su correspondiente pensión para vivir como una miembra acomodada de la clase burguesa [1].
Las consecuencias inmediatas de la alerta fueron numerosos actos de vandalismo en nombre del antifascismo en multitud de ciudades de la geografía andaluza, que parecían que iban a ser constantes durante toda la legislatura, pero realmente no duraron más de una semana. Diez días más tarde el propio Turrión se arrepintió de tal llamamiento al encontrar voces discordantes dentro de su partido, entre ellos Errejón [2].
Análisis de la alerta antifascista
El contenido intelectual de la alerta, como todo lo que viene de un escenario tras unas siglas políticas, carecía del más mínimo alcance crítico e intelectual, no era más que una nueva ordenación de estereotipos políticos que los partidos realizan cuando pretenden decir mucho pero no explicar nada y que sumó un nuevo hito a los que pensamos que un país no puede ir bien mientras permita que gente que no sirve absolutamente para nada, más allá de lo público, pueda acceder a los cargos más importantes de la política.
El discurso comenzó de la siguiente manera, con todos los podemitas mostrando semblantes serios, por no decir solemnes:
«En nombre de Unidos Podemos: Alerta antifascista. Quiero hacer un llamamiento al movimiento feminista, a las asociaciones de trabajadores, a las plataformas de afectados por la hipoteca, al movimiento estudiantil y a los colectivos LGTBI, a las organizaciones de pensionistas Toca movilizarse para defender las libertades, para defender la justicia social, para defender la fraternidad y en última instancia la democracia. Vamos a decirlo muy claro: no tenemos ningún miedo a la extrema derecha. Y frente a la extrema derecha vamos a presentar compromiso y antifascismo militante.“ [3]
Mussolini presentaba al fascismo como oposición al liberalismo y al marxismo [4]. El mal llamado socialcomunista [5] Pablo Iglesias el de la tele, como el resto de políticos de su índole, toma en esta disyuntiva una posición liberal frente al fascismo, pero un fascismo tan débil que no es necesario enfrentársele militarmente, por ejemplo a través de la US o la British Army como en la II Guerra Mundial, sino con agentes propios de la democracia, es decir, el déficit democrático entre la democracia idealista y la realmente existente, que se manifiesta con la presencia de Vox en el parlamento andaluz, se corrige con más democracia[6], la representada en esos grupos llamados a protegerla. Si fuera Pablenin, como algún periodista que otro le nombra, habría aclamado por la llegada de las Brigadas Internacionales dirigidas por la III Internacional o los maquis del PCE, ambos defensores de la libertad y la democracia según la Ley de Memoria Histórica [7], pero que cualquiera que no sea un analfabeto político sabe que es puro relato.
Continuaba de esta forma el podemita por aquel entonces:
“Estas elecciones de Andalucía van a pasar a la historia por la irrupción de una fuerza de extrema derecha, postfranquistas sin complejos, una fuera neoliberal, una fuerza política machista contra las mujeres y la gente trabajadora de nuestro país“[8].
Cualquier partido que participe dentro de este sistema constitucional se puede considerar postfranquista sin complejos. Como bien se sabe, la Constitución del 78 no fue más que la culminación de un proceso de la ley a la ley que comenzó con el RD 2635/1976 del 24 de noviembre de 1976 por el que se somete a Referéndum de la Nación el proyecto de Ley para la Reforma Política y se fraguó durante los años de la Transición. Desde entonces todos los partidos de España han jurado la Constitución y han sido un siervo útil y fiel de EEUU y la UE, contribuyendo al desmantelamiento de nuestra industria, a la privatización de empresas públicas estratégicas y a un endeudamiento sin límites, alcanzando el mayor grado de sometimiento y pérdida de soberanía con el apoyo a las posturas neoliberales de la Agenda 2030, la cual Pablo Iglesias el de la tele tuvo a su cargo en España [9] y que ya están empobreciendo a la clase obrera energéticamente y en materia movilidad con el coche privado, al final no tendrán nada pero serán felices[10].
Y terminaba de esta forma su discurso:
“La irrupción de esta fuerza de extrema derecha se explica, y esto lo venimos diciendo desde hace mucho tiempo, por los discursos del partido popular y Vox: han normalizado y blanqueado los discursos de extrema derecha y ahora tienen junto a ellos, probablemente con voluntad de gobernar junto a ellos a una fuerza abiertamente de extrema derecha que ha sido saludada, nada más y nada menos, que por Jean Marie Le Pen“
El éxito de Podemos en 2014 encarnado en la figura del Coletas, porque en esas fechas se le reconocía únicamente por ese rasgo, se debió en primer lugar al programa de Intereconomía El Gato al Agua y, posteriormente, a otros tantos de Cuatro y La Sexta[11]. Tal éxito llevó al presidente del Banco Sabadell por aquel entonces, Josep Oliu, a proponer un Podemos de derecha, que resultó ser el partido Ciudadanos porque, según él, ni PP ni PSOE defienden la actividad y la iniciativa privada en España[12].
La política de Ciudadanos, un centro político entre PP y PSOE que nunca se convirtió en una oposición real a los mismos sino en un agente de coaliciones, originó el ascenso mediático de Vox, partido fundado en 2013, que sí es en su discurso una ruptura con los dos grandes bloques que se han rifado los cargos políticos desde 1978. Y al igual que Podemos, el auge de Vox se debe a las horas de televisión que le dieron en La Sexta cuando era un partido residual, pese a ser publicidad negativa con respecto a los que ellos vender a su público.
Desde esta tribuna se defiende que ni Vox es un partido fascista ni Podemos un partido socialcomunista o perteneciente a la III Internacional, al fin y al cabo estas denominaciones le sirven a ellos y sus medios de comunicación afines para conseguir patrimonio y dinero entreteniendo y enfrentando a los miembros de la sociedad que se prestan a autoengañarse. Ambos se posicionan como defensores de la Democracia auténtica: para Vox es el respeto a la Constitución vigente y para Podemos la implantación de valores y relaciones entre ciudadanos, como la fraternidad entre la humanidad, utópicas. Según el profesor Gustavo Bueno, los de verde representarían una democracia funcionalista mientras que los de morado una fundamentalista[13]. Por tanto, al creerse ambos poseedores de la verdadera Democracia, como si existiera solamente una, ven al contrario como un enemigo que pone en riesgo el régimen actual, cuando realmente ambos forman parte del consenso político de la democracia realmente existente.
Al fin y al cabo, y dejando los tecnicismos de lado, tanto Podemos con sus derivaciones como Vox representan para el votante clásico de derecha y de izquierda, influido por los grandes medios de información, opciones radicales, por tanto no es descartable que la vuelta al bipartidismo esté más próxima de lo que parecía tiempo atrás. En el caso del nuevo presidente de la Junta de Andalucía, representa un típico andalú bonachón, un hombre que no se mete con nadie y defiende sus posiciones sin estridencias, empatía y un puntito de gracia, bastante alejado de los mensajes histriónicos y apocalípticos de los partidos mencionados anteriormente, quizás con mas posibilidades de éxito en otras comunidades.
La ultraderecha que los grandes medios de comunicación callaron
Denunciaba Pablo Iglesias que el ascenso de la ultraderecha se debe a los discursos de PP y Vox. Pero el término ultraderecha, como socialcomunista, son tan triturados más allá de su verdadero campo de aplicación que ya carece de cualquier alcance político. La primera vez que supe del término ultraderecha, allá por mitad de los noventa, era en referencia a los grupos ultras de equipos del fútbol que se posicionaban detrás del fondo de un estadio, posteriormente la ultraderecha fue la que hizo acercar el petrolero Prestige a la costa gallega, más tarde se insufló en todos los que se oponían a las leyes estrellas de Zapatero y, desde que Podemos está en el cambalache político, cualquier cosa. Un ejemplo reciente: de enero al 8 de marzo de 2020 la ultraderecha consistía en tomarse en serio el Coronavirus y llevar mascarillas, transformándose, incluso antes de acabar marzo, en cualquier movimiento que negara la existencia de dicho virus. Lo que queda claro es que a lo que llaman ultraderecha es a todo aquello que se opone al anarcocapitalismo que representa en España los seguidores de Huertas de Soto y al globalismo promovido claramente por los agentes de la Agenda 2030. Como he repetido en mis escritos muchas veces, ni el movimiento LGTBI, el animalismo, el abortismo, la eutanasia o la teoría del cambio climático antropológico proceden de Moscú, La Habana, Caracas, Pekín o la Belgrado de Tito, sino de EEUU y sus aliados y el nacional-socialismo[14].
Pero antes que Vox ya existían dos partidos que por sus violentas acciones callejeras y manifestaciones si se podrían clasificar como fascistas e incluso nacional-socialistas, se trata de Democracia Nacional[15] fundado en 1995 por Manuel Canduela, miembro de la ya disuelta banda División 250 que interpretaba música RAC/OI[16] y de España 2000, instituida por el empresario de la seguridad José Luis Roberto[18]. Si bien el partido del artista nunca ha conseguido representación política en las instituciones, el del empresario si ha obtenido resultados positivos en elecciones municipales. “En las elecciones municipales de 2015 obtuvo 7 concejales: un concejal en Alcalá de Henares (Madrid) con 5.214 votos (5,82%), tres concejales en Los Santos de la Humosa (Madrid) con 310 votos (25,04%), un concejal en San Fernando de Henares (Madrid) con 1.276 votos (6,54%), un concejal en Velilla de San Antonio (Madrid) con 339 votos (5,93%) y un concejal en Silla (Valencia) con 762 votos (7,54%). En las elecciones municipales de 2019, obtuvo 6 concejales y una alcaldía, todos en la Comunidad de Madrid, la alcaldía la consiguieron en Los Santos de la Humosa, donde con tres concejales (23,25%), consiguieron su primera alcaldía en su historia con Lázaro Polo, dos concejales (10,2%) en Velilla de San Antonio y un concejal (6,68%) en San Fernando de Henares; perdiendo así el concejal de Alcalá de Henares y el concejal de Silla“[19].
Ningún gran medio de comunicación ha dedicado a estos partidos las horas de tertulia que le dedican a otros asuntos menores. Quizás se deba a los siguientes factores:
Los directivos y accionistas de los grandes medios de masas están de acuerdo con el programa económico de Vox porque es el más liberal de entre todos los partidos del cambalache parlamentario. Sin embargo, el de Democracia Nacional y España 2000 es de carácter proteccionista.
Las violentas manifestaciones y disturbios callejeros de estos dos partidos no son del agrado de un votante de centroderecha o conservador.
A Vox se le acusa de todos los mantras de la ultraderecha, los cuales luego nunca se llegan realizar. Y, pese a ser un partido nocivo según el pensamiento dominante, en nombre de la pluralidad y la libertad de expresión, se les ha proporcionado en los medios ingentes horas de publicidad que sus miembros han sabido aprovechar.
Mención aparte merece el diario público.es, cuyo público, valga la redundancia, se trata de una panda de infelices que creen estar haciendo la revolución, cada uno con su idea infundida o subjetiva de izquierda, cuando realmente pertenecen a la izquierda indefinida[20]. Para los periodistas de este medio, esta minoría de luchadores callejeros contra el comunismo, el sionismo, etc. son la coartada perfecta para mantener cautiva y engañada a su clientela, quienes reciben con orgullo el nombre de rojoso socialcomunistas.
[1] a) https://s3transparentia.dev.newtral.es/declarations/2021/noelia-vera-ruiz-herrera.pdf
b) https://maldita.es/malditodato/20211020/noelia-vera-indemnizacion-secretaria-igualdad/
[2] https://www.elindependiente.com/politica/2018/12/12/pablo-iglesias-autocritica-admite-error-alerta-antifascista-vox/
[3]https://www.youtube.com/watch?v=ZlNp1AkOzoQ
[4] Benito Mussolini, “La doctrina del fascismo“ incluido en la decimocuarta Enciclopedia Treccani del año 1932.
[5] https://elmanifiesto.com/dinero/687157045/%C2%A0Terribles-socialcomunistas.html
[6] Gustavo Bueno, Panfleto contra la democracia realmente existente, pg.59.
[7] Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura.
[8]https://www.youtube.com/watch?v=ZlNp1AkOzoQ
[10]https://www.youtube.com/watch?v=ZzdCTyMWQBs
[13] Gustavo Bueno, Panfleto contra la democracia realmente existente, pg.57-60.
[14] Manuel Rodríguez Sancho, El último tren de la democracia, Mascarón de Proa, 2022, 189-198
[15]http://democracianacional.org/dn/
[16]https://www.musica.com/letras.asp?biografia=4882
[17] https://espana2000.es/
[19] https://es.wikipedia.org/wiki/Espa%C3%B1a_2000
[20] El mito de la izquierda.Gustavo Bueno Capítulo 3. Epígrafe 8 punto 3 página 209. Ediciones Pentalfa 2021