El caso Schmitt tiene su réplica en el caso Gramsci: un comunista reivindicado (con resultados notables) por la derecha alternativa. Lo que nos invita a pensar, por una parte, que la distinción derecha-izquierda no es tan nítida e inamovible como algunos pretenden; y por otra parte que, cuando el “centro” es un consenso de mediocridad y conformismo, lo verdaderamente interesante se mueve a los “extremos”.
En el principio era la guerra: carl schmitt ante el siglo XXI (III)
Se desmorona el relato de la globalización feliz, el espejismo de una humanidad armonizada, estandarizada, reconciliada en las “normas y reglas” de occidente. La des-globalización asoma en el horizonte. La obra de Carl Schmitt nos ofrece categorías para pensar el mundo que se avecina.
En el principio era la guerra: Carl Schmitt ante el siglo XXI (II)
La globalización viene acompañada de un fenómeno único en la historia: la desaparición del enemigo. Siendo la globalización algo que abarca toda la humanidad, está claro que la humanidad no puede ser enemiga de sí misma. Siendo el occidente globalizado “el lado bueno de la historia”, está claro que no puede provocar conflictos ni declarar la guerra. Sin embargo, las guerras y los conflictos estallan por doquier. ¿Cómo se ha resuelto hasta ahora esta aporía?
En el principio era la guerra: Carl Schmitt ante El Siglo XXI (I)
Carl Schmitt supo prevenir y conceptualizar como pocos – desde el ángulo del derecho, de la teoría política y de las relaciones internacionales – el mundo que se avecinaba y que es hoy el nuestro: el mundo tumultuoso e incierto del siglo XXI. Un mundo en el que lo viejo agoniza y lo nuevo no acaba de nacer. Por eso, por mucho que se le aborrezca y se le denigre, nuestra época no consigue librarse de su sombra.
La mirada en masculino: el mundo de Sam Peckinpah (II)
A Peckinpah le fascinaban los personajes anacrónicos y perdedores. Sus obras transmiten un sentimiento específicamente masculino: la nostalgia por una época más agreste hecha de hombres con los instintos alerta, solidarios con su tribu, agresivos y dispuestos a defenderse.
La mirada en masculino: el mundo de Sam Peckinpah (I)
Para los que consideramos a la civilización norteamericana como un maelstrom de fealdad que se abate sobre el mundo – como una monstruosa verruga de la civilización occidental – observar las luces que también produce esa cultura es un ejercicio de compensación. Éstas tienen que ver, casi todas ellas, con la identidad enraizada de un país “normal”, ajeno al afán redentorista de uniformizar el mundo. O con una conciencia crítica que cuestiona los mitos fundacionales de los Estados Unidos. El “cine del oeste” – creación norteamericana por excelencia – es uno de esos ejemplos luminosos. No es nada casual que hoy no esté de moda.
Posdemocracia, el viaje hacia la nada (4)
La democracia es sinónimo de “pluralismo”, de diversidad de ideas, de libertad de expresión, de sociedad civil “vibrante” y “dinámica” – eso dice el prospecto. La democracia es el sistema que mejor promueve la espontaneidad social, el espíritu crítico, la madurez de los ciudadanos, la independencia frente a dogmas e ideologías estatales – eso dice el Relato.
Posdemocracia, el viaje hacia la nada (3)
Se dice que la democracia es el “menos malo” de todos los sistemas políticos posibles. Lo cual podemos admitir sin demasiadas objeciones, aun asumiendo que la democracia no es el “gobierno del pueblo” y que el pueblo no ha gobernado, ni gobierna, ni gobernará nunca. Es preciso entonces identificar en qué consiste el “mínimum” democrático, el umbral a partir del cual puede empezar a hablarse de democracia.
Posdemocracia, el viaje hacia la nada (2)
La democracia está en crisis, la democracia está enferma, la democracia está en peligro, repite un coro cada vez más numeroso de voces. A decir de algunos hemos cruzado ya el umbral hacia un nuevo régimen que, a falta de un término mejor, podemos denominar posdemocracia. En la hora actual el lustre y esplendor de la democracia – el menos malo de todos los regímenes, según dicen – se asemejaría al de una supernova: su brillo se intensifica antes de desaparecer.
Posdemocracia, el viaje hacia la nada (1)
La risa siempre ha tenido una función política. Suele atribuirse a la risa la virtud de actuar como un contrapoder, la de deslustrar el oropel de los grandes del mundo, la de relativizar las verdades solemnes, la de inducir al pensamiento crítico. Gran error. En realidad, la risa es conservadora y conformista por naturaleza. La risa amansa a las fieras.
Todo estaba en pasolini (2)
La película no fue muy entendida en su momento. Muchos la descartaron como el capricho de un enfant terrible, como los delirios de una mente enferma o como un film de explotación. Los menos espabilados vieron en ella una simple condena del fascismo. Pero como decía Pasolini, “cuando vuelvo del infierno – si vuelvo – he visto otras cosas, más cosas. Y tenéis que cambiar de tema para no afrontar la verdad”.
Todo estaba en Pasolini (1)
Toda empresa intelectual que se precie es, entre otras cosas, un intento de descifrar el sentido del presente, de comprender el momento histórico en que se vive. Una tarea en la que es fácil perderse en falsas pistas, confundir las causas y las consecuencias, no distinguir lo esencial de lo accesorio y enredarse en problemas irrelevantes o tan sólo aparentes.
Izquierda caviar y filósofo escénico (un retrato y tres instantáneas)
Todo discurso ideológico necesita iconos de carne y hueso. El discurso de los poderes dominantes ha tenido durante varias décadas a uno de sus más fotogénicos paladines en la persona de un filósofo y escritor francés: Bernard-Henri Lévy (“BHL”, nombre de marca). BHL encarna la esencia más prístina de la izquierda caviar; como intelectual de corte y como filósofo escénico, BHL representa el espíritu de toda una época. Su figura nos invita por tanto a una somera indagación crítica.
Un católico antipático: Evelyn Waugh
Evelyn Waugh fue posiblemente el mejor escritor británico de su generación. Lo que no es poco decir, habida cuenta de que su época – la primera mitad del siglo XX – fue la última edad de oro de la literatura europea. Tenía Waugh un carácter rasposo, cáustico y atrabiliario. Cuentan que un día, en una fiesta, una matrona le espetó: “siendo tan católico como dicen que es ¿cómo puede usted ser tan grosero?”.
Nuestros valores
¿Por qué luchamos? Esa es la eterna pregunta de todos los hombres que, desde que el mundo es mundo, han enfrentado su suerte desde un campo de batalla. Una pregunta que condensa la ultima ratio de una existencia: normalmente sólo se vive por lo que se muere. Puestos a morir, los hombres lo hacen por su familia, por su patria, por su idea de Dios, incluso por una idea de justicia social. Los hombres, en general, prefieren morir por cosas concretas.
¿Conclusión o retorno?. El “fin de la historia” treinta años después
El año 1989 concluyó con un gigantesco THE END. La caída del muro de Berlín marcó el fin de la guerra fría y la parusía incontestada de la democracia liberal. Anticipándose unos meses a la caída del muro, un oscuro consultor del Pentágono había publicado un artículo en el que afirmaba que la universalización del modelo democrático de occidente suponía el punto final en la evolución ideológica de la humanidad. O dicho en términos más amplios, el mundo asistía al “fin de la Historia”.
Izquierda y derecha, especies mutantes (III)
El auge del populismo ha propiciado una nueva especialidad: la de los expertos en la “nueva extrema derecha”. Estos drones académicos patrullan el espacio político para vigilar los peligros que acechan a la democracia, y cumplen con ello una función normalizadora: la de reconducir el inquietante fenómeno de las derechas mutantes a las tranquilizadoras aguas de la derecha cavernaria, cuando no del fascismo insepulto.
Izquierda y derecha, especies mutantes (II)
El instinto conservador está en la esencia de la derecha y conforma una venerable tradición política. Pero abandonados por el capitalismo y el liberalismo, los conservadores son como la tripulación de un barco a la deriva. En el agotamiento de la tradición política conservadora se encuentra una de las claves de lo que hoy podemos llamar la “derecha mutante”.
Izquierda y derecha, especies mutantes (I)
La izquierda y la derecha ya no son lo que eran, y cabe preguntarse en primer lugar si todavía existen. La presunta obsolescencia de este binomio es, desde hace ya décadas, un lugar común en la teoría política. Al fin y al cabo – razonan los expertos – esta categorización es cada vez más irrelevante a la hora de pensar desafíos como la globalización, el cambio climático, la biogenética, el transhumanismo, el multiculturalismo, la crisis del Estado-nación o la promoción de los derechos humanos, entre otros muchos.
Guillaume Faye y la visión del Arqueofuturismo (II)
Ante las tempestades que se acercan, nunca han estado los europeos menos preparados: invadidos, desvirilizados, física y moralmente desarmados, prisioneros de una cultura de la insignificancia y de la culpabilidad masoquista. Los europeos nunca han sido tan débiles como en este momento, cuando la gran amenaza se dibuja en el horizonte.
Guillaume Faye y la visión del Arqueofuturismo (I)
Dentro del pensamiento crítico, anticipar el futuro es siempre lo más arriesgado: o bien se hace el ridículo o bien se gana un aura de profeta, normalmente a título póstumo. Para conjurar el riesgo los escritores visionarios se refugian en los dominios permisivos de la ciencia ficción. Georges Orwell (1984), Aldous Huxley (Un Mundo Feliz) y Ray Bradbury (Fahrenheit 451) son los ejemplos más destacados.
Ni ovejas ni rebaño. La rebelión de los católicos identitarios
Haciendo gala de un peculiar criterio para urgencias y prioridades, en julio 2021 el Papa Francisco restringió el uso del latín en las liturgias católicas. Una decisión que ciertamente no hizo que el mundo se parase. Al fin y al cabo, a quién le importa el uso de una lengua que nadie entiende en unas ceremonias que pocos atienden. Pero más allá de su relevancia práctica, el hecho tiene su importancia simbólica…
Limonov, la sonrisa del rojipardo
El pensamiento twitter es la cantera en la que esas lumbreras encuentran a diario su minuto de gloria. El apelativo “rojipardo” es una etiqueta-ladrillo más, a la hechura de los imbéciles. Con ella pretenden desactivar algo que instintivamente perciben como peligroso, pero que son incapaces de comprender. En breve: el apelativo “rojipardo” funciona como una palabra-policía de la izquierda liberasta, con el objetivo de aplastar a quien se salga de su redil.
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita – (y VII)
El término “indoeuropeo” es una noción fundamentalmente lingüística, no racial o étnica. No obstante, cualquier enfoque más o menos extenso sobre las razas y el racismo parece incompleto si no aborda, en un momento u otro, la cuestión de los indoeuropeos y su existencia real o figurada.
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita (VI)
En una entrevista publicada por el diario israelí Haarettz (noviembre 2005) el filósofo franco-judío Alain Finkielfraut declaraba: “el antirracismo será en el siglo XXI lo que fue el comunismo en el siglo XX”. Una afirmación que generó gran polémica. ¿Es el antirracismo el “comunismo del siglo XXI”?
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita (V)
La formulación “canónica” de la teoría del gran reemplazo (también conocida como “gran sustitución) fue elaborada hace años por el escritor francés Renaud Camus, cuyo perfil inicial – militante socialista, ecologista, gay – lo hacía, en principio, poco sospechoso de afinidades ultraderechistas. Sobre su supuesto “conspiracionismo”, Camus lo desmiente de forma categórica. Para el escritor francés la gran sustitución no es una “intencionalidad” más o menos oculta sino una dinámica inherente al sistema.
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita (IV)
Criticar el “capitalismo” tiene mala prensa. Se trata de una crítica demasiado sobada por la extrema izquierda, y eso resta credibilidad. Conviene por ello hacer una aclaración. “Capitalismo” no equivale en estas líneas a “libre mercado”, ni a “libre iniciativa”, ni a “propiedad privada”. De hecho, la propiedad privada, la libre iniciativa y la libertad en general se encuentran cada vez más limitadas por las condiciones reales impuestas por el régimen del capitalismo absoluto.
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita (III)
Lejos de vivir en un mundo post-racial, hemos entrado en la era hiper-racial. La raza nos rodea y está por todas partes: puedes verla al mirar por la ventana, al fijarte en un escaparate, al encender la televisión; puedes sentirla al ir a trabajar, al pagar los impuestos, al cruzarte con el vecino… ¿Mátrix? La nueva ideología hegemónica se sostiene en occidente sobre una reinvención de la raza, sobre su omnipresencia, sobre su ubicuidad opresiva. Todos serán juzgados por el color de su piel.
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita (II)
La raza no es una realidad que pueda seguir ocultándose bajo la alfombra. A ello ha contribuido, de forma decisiva, un hecho que ha supuesto una ruptura epistemológica – una auténtica revolución – en las ciencias naturales. En el año 2003 se publicó el primer mapa completo del genoma humano, como resultado de un proceso científico de más de dos décadas. ¿Cuál ha sido su impacto sobre el estudio de las diferencias humanas? ¿De qué manera afecta al dogma de la inexistencia de las razas?
La raza, el retorno intempestivo de una idea maldita- (I)
La raza es una idea maldita que goza de excelente salud. A fuer de no existir – según nos dicen – las razas y sus diferencias se perfilan como la gran obsesión del siglo. Se recurre en todo ello a una suerte de prestidigitación dialéctica: se habla de “racializados” y “racializadas” y se evita la palabra proscrita. Astuto, ¿verdad?
Derechita en pie de guerra (cultural)- 2ºparte
A cierta derecha cultural le cuesta emprender la guerra contra quienes deberían ser sus principales enemigos: el (neo) liberalismo y el mundialismo. Y prefiere emprenderla a palos contra un viejo conocido: ¡el comunismo!
El revival anticomunista de cierta derecha es un rasgo anacrónico que refleja fielmente un anacronismo gemelo: el “antifascismo” de izquierdas. Sorprendentemente, en España casi todas las derechas se encuentran en este punto. ¿A qué obedece eso?
Derechita en pie de guerra (cultural) 1º parte
Intentaremos analizar en las próximas líneas las razones del naufragio cultural de esa derecha sistémica, con una especial atención al “centro-derecha” español. ¿Por qué la vieja derecha, a pesar de haber tenido los medios, la influencia y el poder durante décadas, es incapaz de disputar la hegemonía cultural a la izquierda? ¿Por qué en las “guerras culturales” la vieja derecha no está ni se la espera?
Para acabar con el siglo XX
Una introducción al libro “El retorno de los dioses fuertes” de R.R. Reno que será publicado próximamente por España por la editorial Homo Legens. A lo largo de su alegato, el autor pone el foco en las endebleces del consenso ideológico occidental tal y como ha sido conformado a partir de 1945. En lógica consecuencia, lo que sigue es una crítica radical del laissez-faire capitalista, del globalismo y del individualismo neoliberal, es decir, del horizonte mental insuperable de tantos supuestos defensores de la “civilización judeocristiana”.
La religión perece por el kitsch
La Iglesia católica es hoy otro campo de batalla – uno más – en las guerras culturales de la posmodernidad. Una institución de dos milenios de recorrido, en la que bajo la sombra de los gigantes se alberga – de forma cada vez más invasiva– el kitsch de los mediocres.